El arquetipo del “dueño del mundo”
Se atribuye a Sigmund Freud una sentencia afortunada que dice: “El que ama sufre y el que no ama enferma”. Supongo que Freud a pesar de la abundancia de la información, acerca del ser humano, que había acumulado, a lo largo de su vida profesional, no había reflexionado acerca de los personajes que no aman